jueves, 29 de octubre de 2015

El valor educativo de la literatura

Extractos del discurso que el escritor Arturo Pérez Reverte ha pronunciado en el Congreso de Educación de Santillana organizado en Puerto Rico


Arturo Pérez Reverte, en un momento de su discurso. / SANTILLANA
“La literatura da herramientas prácticas de vida, se adelanta a lo que esos jóvenes tendrán que vivir en el futuro. Les proporciona analgésicos para soportar el dolor, armas para combatir, mecanismos para comprender. Pone a su disposición esos tres mil años de cultura, de ciencia, de experiencia y de memoria”. 
“Mi última novela se titula “Hombres buenos”, y se refiere a quienes, en el siglo XVIII, creyeron que era posible cambiar el mundo con libros. Hacer a sus conciudadanos, con libros y lectura, más cultos y en consecuencia más libres. En este último año, en las entrevistas de prensa, muchas veces me han preguntado quiénes son hoy los hombres buenos. A quiénes podemos llamar así. Y en todos los casos he respondido lo mismos: los hombres buenos, hoy, son los profesores. Los maestros. Esos hombres y mujeres con frecuencia mal pagados, maltratados a menudo tanto por el sistema como por la incomprensión de los propios padres de sus alumnos, que sin embargo siguen fieles a su vocación y a su oficio, intentan salvar a la mayor parte de los chicos que se les encomiendan. Esos maestros capaces de dejar huella, de abrir caminos, de merecer que, pasado el tiempo, algunos de esos alumnos los recuerden con afecto y respeto. Héroes anónimos que saben que de los veinte o treinta chicos que tiene en clase no se salvarán más que algunos, pero que esos pocos ya habrán justificado sus esfuerzos. Su trabajo. Y para esos hombres y mujeres buenos, para esos maestros, la mejor herramienta, el mejor argumento, es un libro. Un libro que sepa, gracias a ellos, captar la atención del niño, fascinar al joven, forjar al adulto”. 

Regreso a la casa de Bernarda Alba

El Ayuntamiento de Valderrubio compra y restaura la propiedad que inspiró el drama



A Federico García Lorca la inspiración no le vino del cielo, sino de la tierra y del pozo medianero que compartían en el pueblo, pared con pared, sus tías y la familia de Frasquita Alba. Así se lo confesó el poeta al entonces embajador chileno, Enrique Morla Lynch, que tuvo el privilegio de escuchársela entera, de viva voz, cuando Federico se paseaba con el manuscrito por todo Madrid en 1936: "Hay, no muy distante de Granada, una aldehuela en la que mis padres eran dueños de una propiedad pequeña. En la casa vecina y colindante a la nuestra vivía una viuda de muchos años que ejercía una inexorable y tiránica vigilancia sobre sus hijas solteras. Prisioneras privadas de todo albedrío, jamás hablé con ellas, pero las veía pasar como sombras, siempre silenciosas y siempre vestidas de negro. Ahora bien, había en el confín del patio un pozo medianero, sin agua, y a él descendía para espiar a esa familia extraña cuyas actitudes enigmáticas me intrigaban. Y pude observarla. Era un infierno mudo y frió en ese sol africano, sepultura de gente viva bajo una férula inflexible de cancerbero oscuro. Y así nació La casa de Bernarda Alba, en que las secuestradas son andaluzas, pero como tú dices, tienen quizás un colorido de tierras ocres mas de acuerdo con las mujeres de Castilla".
Los Alba, los Roldán y los García eran las familias pudientes de la Vega granadina. Que un descendiente de aquel triunvirato terrateniente pusiera en solfa las vergüenzas de los demás no sentó bien. Les unían conflictos de negocios y lindes, pero también parentescos. De Federico, además, les separaban unas fuertes convicciones tradicionalistas frente al lejano cosmopolitismo y los rumores de homosexualidad que acompañaban al poeta. Así que para las familias contrincantes, el conocimiento de que había escrito un drama tan directamente inspirado en sus vidas, les hizo levantar el hacha de guerra. Hasta el punto de alentar su asesinato.

miércoles, 28 de octubre de 2015

18 frases que dices a menudo y salieron de un anuncio


Parece mentira, pero no todo lo que decimos en nuestra vida diaria son latiguillos popularizados por José Mota o Chiquito de la Calzada, ¿te das cuen? Como manifestación de la cultura popular, los creativos publicitarios también han inventado frases en sus anuncios que han acabado calando en la gente. Tanto que, a pesar de la fugacidad propia de los anuncios, las repetimos con frecuencia años después.

martes, 27 de octubre de 2015

Zenobia Camprubí sale de la sombra de Juan Ramón Jiménez

Se editan los Diarios de juventud. Escritos.Traducciones, textos inéditos que revelan la independencia de la poeta y traductora



Zenobia Camprubí, hacia 1905
Su voz nítida sale del escondite. Se llama Zenobia Camprubí Aymar.Y aunque en el recuerdo colectivo es la esposa y sombra de Juan Ramón Jiménez, fue, en realidad, la luz y guía del gran poeta español. Era una mujer fuerte que sabía lo que quería para ella y para él. Lo revela ella misma en unos inéditos de sus diarios de juventud y en poemas, relatos y artículos de diferentes épocas que aclaran aspectos de su vida personal, sentimental y literaria, hasta crear un autorretrato desconocido.
“La vida es vana, / Un poco de amor, / Un poco de odio, / Y luego buenos días…”, dice en uno de sus poemas, escritos al principio con su letra cuidada, aunque ese trazo se haría más rápido con los años y se esparciría de palabras casi indescifrables.
Es el nuevo retrato que emerge en Zenobia Camprubí. Diario de Juventud. Escritos. Traducciones, con edición e introducción de Emilia Cortés Ibáñez, publicado por la Fundación José Manuel Lara, y colaboración de Carmen Hernández-Pinzón, sobrina nieta y representante de los herederos de JRJ y Camprubí. La obra llega hoy a las librerías y amplía la exposición Zenobia Camprubí, en primera persona, en el sevillano Museo de la Autonomía de Andalucía.
“Este libro es para que la veamos a ella. Para que nunca más esté escondida. Siempre hemos visto a Zenobia en función de Juan Ramón. Aquí se le ve a ella sola, porque antes de conocerlo a él ya era ella. Se casó y siguió siendo Zenobia. No le hacía falta ser De Jiménez. Fue una mujer inteligente, autónoma, fuerte, directa, clara y práctica. Y lo siguió siendo al lado del hombre que amó y la amó”, afirma Emilia Cortés, tras casi 15 años de investigación. Esta obra se suma a los tres diarios de correspondencia de Camprubí, a sus textosJuan Ramón y yo (1954) y a las traducciones que hizo de Rabindranath Tagore.

Nueva búsqueda de los restos de García Lorca

Tras las infructuosas campañas de 2009 y 2014, un equipo de arqueólogos y expertos está a punto de excavar entre Víznar y Alfacar en busca de los restos del escritor



García Lorca con sus sobrinas
en 1935
Al llegar al paraje, uno recuerda el Poema de la Soleá: "Tierra seca, tierra quieta de noches inmensas". Si hubo un genio que supo entretejer en vida un inquietante juego de premoniciones, ese fueFederico García Lorca. Sobre la tierra seca de lo que es hoy el polígono número 9 de Alfacar, en la finca inscrita en el registro de la propiedad número 5 de Granada, con el número 1833, libro 44, folio 97, encima de un medio vertedero yermo de hojarasca, hierbajos y pedregal, ahí justo, en un radio de 160 metros cuadrados, podría encontrarse el cadáver del poeta. Lo dicen Miguel Caballero y Javier Navarro, responsables del equipo de investigación que quiere descubrir el lugar exacto de su muerte y que está a punto de acometer una nueva fase de excavaciones en busca del autor de Poeta en Nueva York, enterrado junto a quienes fueron ejecutados con él en la noche del 17 de agosto de 1936.

A expensas de un visto bueno meramente jurídico por parte de laJunta de Andalucía, otro escuadrón formado por historiadores, arqueólogos, geólogos y forenses procedentes de varias universidades de España, Argentina y Reino Unido, espera paciente su turno para excavar. Será el tercer intento. Dos fallidos lo preceden.
El primero, basado en la legendaria investigación de Ian Gibson, se produjo en 2009 y no dio resultado en el paradero exacto, junto al olivo donde hoy abre la puerta un parque conmemorativo. El segundo fue en 2014, corrió a cargo del mismo equipo actual y se quedó a un palmo del lugar ahora previsto para empezar a cavar.

¡Viva la coma!


En Libros y Literatura

domingo, 18 de octubre de 2015

Chistes con lengua







-Cielo, podrías dejar de hablar de música si yo te lo pidiera. 
-Si, mi sol.


Luis Piedrahita

Cervantes, vida de novela en cómic

Una exposición contrapone la biografía del autor con su obra a través de dibujos de Miguelanxo Prado y David Rubín



Cervantes, dibujado por Miguelanxo Prado.
Al gran personaje que fue Miguel le faltó un Cervantes que le escribiera. Hizo por su rey lo máximo que se podía pedir a un súbdito en el siglo XVI: jugarse el tipo como espía y jugarse el talante como recaudador de impuestos. Miguel de Cervantes, fallecido en 1616, guerreó en batallas navales, sobrevivió a un largo cautiverio en Argel y tocó una cima de la literatura universal que, cuatro siglos después, ahí sigue plantada, viendo otras novelas pasar.
Esa vida literaria, con grandes claroscuros, se recoge en 36 ilustraciones del dibujante Miguelanxo Prado (Bergondo, A Coruña, 1958), que pueden verse desde ayer en el Museo Casa Natal de Cervantes de Alcalá de Henares en la exposición Miguel EN Cervantes. El retablo de las maravillas, organizada por Acción Cultural Española, la Comunidad de Madrid y el Instituto Cervantes con motivo del cuarto centenario de su muerte, en 2016.
El recorrido gráfico realista de Prado se contrapone a las viñetas satíricas creadas por el dibujante David Rubín (Ourense, 1977), que ha llevado al cómic El retablo de las maravillas, un entremés con visos autobiográficos o, al menos, con pistas sobre una cierta manera de ver el mundo. “De un modo no explícito hay temas como la familia, la religión, el ejército o el amor que retratan su pensamiento”, señala Rubín.
Un entremés que Cervantes no llegó a ver representado y que hoy mantiene su vigencia, en opinión del dibujante. “Hay una crítica muy dura contra el poder establecido. Más de uno de los que nos gobiernan ahora debería leerlo”. 

domingo, 11 de octubre de 2015

Las mujeres olvidadas del 27

Marga Gil Roësset
La denominada Generación del 27 se ha convertido en una de las marcas artísticas más reconocidas que identifica un momento crucial (1923-1936) en la historia cultural y social de España. El hecho de formar parte de esta generación ha permitido que sus integrantes oficiales, entre los que se encuentran Federico García Lorca, Luis Buñuel, Salvador Dalí, Rafael Alberti o Luis Cernuda, hayan gozado de popularidad y hayan sido objeto de atención nacional e internacional.

Pero este reconocimiento solo existe hacia ellos, aunque en esta explosión creativa también había mujeres: surgió la que fuera la primera generación de mujeres que entró sin complejos en el mundo artístico.

María Teresa León
Mujeres de gran talento que compartieron entre ellas amistad, reflexiones y vivencias y que influyeron de forma decisiva en el arte y pensamiento españoles y, en algunos casos, debido a su producción en el exilio, en los estilos y géneros de artistas internacionales. La Guerra Civil supuso el fin de esa generación, para ellas supuso también su condena al olvido.

Reconstituida la democracia, los nombres de sus colegas fueron recuperados y ensalzados, mientras que los de ellas permanecieron en silencio, perdiendo su lugar, de pleno derecho, dentro del relato oficial de la Generación del 27 y, por consiguiente, en la historia. María Teresa León, Ernestina de Champourcín, Rosa Chacel, Concha Méndez, Josefina de la Torre, María Zambrano, Maruja Mallo y Marga Gil Roësset son una representación de estas creadoras. 

Rtve les dedica un documental en el programa Imprescindibles.

Ver el programa Imprescindibles