domingo, 27 de julio de 2014

¿Puede alquilarse un vientre?

El empleo por parte del diario El País de la expresión “vientre de alquiler” para aludir a la gestación del embrión, tras acuerdo con los futuros padres y el empleo de técnicas de reproducción asistida, por parte de una mujer es muy criticada por las personas que han acudido a esta solución. “Creo que dicha expresión no define el método de reproducción asistida gracias al cual vinieron mis hijas al mundo. Y lo más importante, dicha expresión daña la dignidad de mis hijas y de la mujer que nos ayudó a que nacieran”, argumenta José Luis Hernando. Íñigo insiste en el mismo argumento: “Denominar a esta técnica de reproducción asistida con esa expresión vulgar y soez resulta denigrante para todas las partes implicadas en dicho proceso, tanto para las familias que recurren a dicha técnica como para las gestantes por no hablar de los menores. Ustedes saben lo importante que es el lenguaje y el correcto uso del mismo y seguro que entienden la implicación que tiene el uso de la expresión 'vientre de alquiler' (...) El verdadero nombre de la técnica de reproducción asistida no es otro que 'gestación subrogada' que quizás resulte menos sensacionalista pero no ataca a la dignidad de familias y gestantes”.

Sobre si la expresión es vejatoria, la FAPE (Federación de Asociaciones de Periodistas de España) en una resolución de este año de su Comisión de Quejas, rechazó que pudiera considerarse lesiva para la condición de los individuos ya que “responde a una realidad consistente en alquilar el útero de una mujer para gestar un embrión en el que no participa genéticamente, mediante un contrato y el pago de una suma de dinero”. Fundéu (Fundación del Español Urgente) respondió en Twitter a una pregunta sobre si era correcto el término con un lacónico “sí, es correcto”.

El concepto de “alquiler” cosifica el cuerpo femenino. Aunque la Real Academia, refiriéndose a personas, admite el término como verbo pronominal (“ponerse a servir a otra por cierto estipendio”), el sentido general asocia el alquiler a cosas o servicios. No se alquilan, por ejemplo, carpinteros.

Victoria Camps, que fue presidenta del Comité de Bioética, no advierte en la expresión “vientre de alquiler” una intención vejatoria y resulta más comprensible que el concepto de subrogación. “Detrás hay la misma realidad y cambiando el lenguaje no se cambia la realidad”. Con todo, atendiendo a que el término “subrogado” carece de las connotaciones que puede generar el primero, “no se presta a tantas fabulaciones”, admite que resulta preferible su empleo aunque se sacrifique algo la comprensión. Siguiendo este criterio, y a pesar de todo lo expuesto, es preferible el abandono del término “alquiler”.





sábado, 12 de julio de 2014

¿Destripe o spoiler?


La palabra española destripe es una alternativa válida al anglicismo spoiler, que se usa a menudo
en las informaciones sobre cine y series de televisión para referirse a la descripción de una parte sustancial
de la trama cuyo conocimiento puede arruinar el
interés por el resto de la narración.
En los medios de comunicación y en las redes sociales el término inglés se emplea muy a menudo en frases como «Los spoilers ya no son fruto de un comentario desafortunado», «La mejor manera de evitar los spoilers es huir de aquellos que sabes que son aficionados a hacerlos» o «Advertencia: spoiler».
El verbo destripar tiene exactamente
ese significado según el Diccionario académico y también se usa con
frecuencia en ese contexto. No se trata además de una acepción reciente, sino
que apareció por primera vez en el Diccionario de 1884.
A partir de destripar pueden formarse tanto destripamiento, recogido en el Diccionario como ‘acción y efecto de destripar’, como destripe, preferible por contar
ya con uso en este sentido y estar bien formado, siguiendo el paradigma de otros sustantivos coloquiales como flipar-flipe, desmadrar-desmadre…
Así, en los ejemplos anteriores habría sido preferible escribir «Los destripes ya no
son fruto de un comentario desafortunado», «La mejor manera de evitar los 
destripes es huir de aquellos que sabes que son aficionados a hacerlos», 
«Advertencia: Destripes».
Leído en Fundéu (Fundación del Español Urgente)

lunes, 7 de julio de 2014

Corre, correo

El sistema postal siempre tuvo relación etimológica con la rapidez, aunque la de entonces nos parezca ridícula ahora.
Los correos que corrían de un lado a otro fueron mejorados luego por la estructura postal, que ya no se basaba en las piernas sino en las patas. (Por ahí nos vamos acercando a la estafeta). Los caballos recorrían grandes distancias con el sistema de posta, palabra que en su día tomamos del italiano. Se desarrollaba así una carrera por relevos para llevar las cartas a su destino. Cada dos o tres leguas, un equino era sustituido por otro apostado en el camino, gracias a lo cual el jineterepostaba.El “correo” humano que trasladaba cartas y mensajes en tiempos remotos se desplazaba corriendo, y por eso se emparentan el sustantivo y el verbo: correo, correr. En esa estirpe de términos hallamos “carrera”, y “curso”, y “cursar”..., y “currículo” (una “carrerita”, pues la palabra procede de la modestia de quien presentó el primero). Y “cursor” (“corredor” en latín). Todo ello gracias al verbo latino curro (participio, cursum) y a su ancestro indoeuropeo kers.
El mundo del caballo nos trajo también la pieza metálica “estribo”, palabra castellana de presumible origen germánico que significó “apoyo”. Pero al “estribo” se le dice en italiano staffa, término que proviene a su vez del indoeuropeo stebh: “pisar”, “apoyarse” (de ahí sale step en inglés: “paso”). Y el italiano escogió la expresión corriere a staffetta (a partir del diminutivo de staffa: “apoyo pequeño” para diferenciar el correo pedestre del correo en caballería.
El hecho de que aquellos animales con sus estribos se fueran reemplazando en los caminos originó incluso que la voz staffetta designe en italiano las carreras de relevos (staffetta 4x100 metri), a las que nuestro idioma aplica a su vez el vocablo “posta” (“el mejor velocista corre la última posta”). Y “estafeta” se llama precisamente en el español de algunos países de América al testigo que se van pasando los relevistas.
Las palabras parecen relevarse también entre ellas al transportar un significado.

Olvidado rey Gudú

Tuvo que hacer un gran esfuerzo para que sus párpados, súbitamente pesados, no se cerrasen. Normalmente, no le suponía ninguna molestia permanecer alerta y al acecho con todos sus sentidos, pero en aquel momento una gran pesadez, una penosa sensación de inutilidad se había apoderado de toda su persona; y sólo el asombro que esto le produjo pudo evitar que cayera totalmente en la zona oscura y densa que se abría lentamente ante él. Creyó oír los golpes de su corazón contra la tierra. "¿Pero ante quién?, ¿ante qué? ¿Qué es lo que amenaza desde ahí..., del fondo del río?".

Imprescindible Ana María Matute

miércoles, 2 de julio de 2014

Viva Ana María Matute

Ana María Matute

"Viva Ana María Matute, porque vivirá siempre mientras vivan sus libros, tan excepcionales los que escribió para niños como los que dirigió a los adultos, y Olvidado Rey Gudú, solitario habitante de la tierra de nadie de la literatura fantástica en español, la isla desierta que ella colonizó para nosotros. Viva Ana María Matute, porque no morirá nunca, porque no ha muerto ni siquiera ahora". (Almudena Grandes)